Opinión. Hoy no le traemos tanto una foto que merece comentario, sino una curiosidad que ha sido planteada para llevarse a cabo en Barbate. Desde la más mejor delegación que existe en el Ayuntamiento se ha planteado la posibilidad de crear una Feria Cofrade, donde las hermandades pudiesen “sacar los pasos”, “vender sus cosas”, los titulares expuestos en fila y las bandas dar porrazos y soplíos.
Se conoce que la persona encargada de tal excelsa idea sabe bien del terreno y sabe perfectamente lo fácil que es sacar “un paso a la calle”. El poco coste que tiene y los escasos permisos eclesiásticos que hay que solicitar. Ni que decir tiene que sabe tanto que no se le ocurría exponer las imágenes sagradas así en plan como si fueran maniquíes de Juanito Gallardo o Galerías Sánchez.
Se ve que la persona que ha trasladado la intención del Ayuntamiento es una experta en estas lides y sabe perfectamente que “las cosas” que se venden (entendemos que estampas, pines y demás), no son como si fueran souvenirs que llevarse de una feria de muestras o de artesanía.
Imaginaos la situación. La Lonja Vieja llena de puestos como en la feria del Libro, allí cada hermandad y cofradía expone “sus cosas” y las vende al mejor postor. De repente empieza una “cabalgata” a pasar, aparecen Micky y Minnie Mouse vestíos de penitentes. Sale una “carroza” con un palio, la banda toca, luego otra con un misterio, la banda toca, ahora las damas vestías de mantilla, otro palio y luego otra banda.
Y cómo no, la churrería del parque -que tan poco impacto visual tiene- vendiendo su chocolate. Para darle más sabor, un puesto de buñuelos y una food track para comprar torrijas y roscos -aquí gente del equipo de gobierno o que se presenta como del equipo de gobierno puede aprovechar y ponerse púo de gañote como suele hacer- y musicote cofrade doquier a tope.
Ya después por la noche una actuación de rock cofrade de la INCENSARIO BAND y fuegos artificiales de marca INRI.
Proponemos el nombre de Capilleo Fest y celebrarlo como el Oktober Fest. Así se podría atraer a más turistas extranjeros que dirán cuando huelan a incienso aquello de: “Oh, my God”. Así se les “anima”, como diría el alcalde en Diputación.
Cuentan las escrituras que Jesús echó del templo a los mercaderes que lo utilizaban como un lugar de negocio y mercadeo: A los que vendían les dijo: «Quiten esto de aquí; no hagan de la casa de Mi Padre una casa de comercio».
Pero esto sólo aparece en la Biblia ¿Va a saber más el libro ese que la iluminada que ha tenido tan brillante idea?
PD: Tanto el cartel como el texto sólo son una broma, pero la realidad supera la ficción…